Castillo de los Marqueses de Camarasa en Muel, Patrimonio en la Provincia de Zaragoza
Castillo de los Marqueses de Camarasa en Muel
El castillo de Muel, de origen musulmán, era conocido como al-Udri Muwala, y más tarde como Molle, tal como se recoge en un documento del año 1127.
La fortaleza fue tomada por Alfonso I el Batallador en 1118, tras la rendición de Zaragoza, aunque la población musulmana de la villa permanece en ella.
Un año después es concedida en señorío al caballero Gastón de Verán como recompensa por su importante ayuda prestada al rey Alfonso I el Batallador en la toma de Zaragoza.
En 1383 Pedro IV concedió franquicias a todos sus habitantes, que entonces pertenecían al señorío de los Azagra de Villafeliche.
Después pasó a Fernán López de Luna al casarse éste con Emilia Ruiz de Azagra, que aporto la villa de Muel como dote en su boda.
Tras la muerte de su propietario en 1392, Juan I lo dio a Fernando López de Luna, señor de Ricla, y en 1610 el señorío esta ya en manos del marqués de Camarasa.
De él se conservan dos torreones con troneras y algunos muros rebajados, que sirven como mirador a las bellas cascadas del Río Huerva.
Se sabe que constaba de dos partes, la antigua, que corresponde al castillo en sí, y la nueva, formada por el palacio.
El Palacio era entonces habitable y tenía una entrada principal, caballerizas, un recibidor con escalera principal, un salón donde se jugaba a la pelota, una habitación que daba a la Ermita de la Virgen de la Fuente, un torreón que albergaba el archivo de los marqueses y una habitación principal cuyas tres puertas daban al oratorio, a la ermita y a las falsas.
El Castillo o fábrica antigua estaba totalmente arruinado y era, según los peritos, irreparable. Se distinguían en él una puerta principal y un torreón de cantería. El castillo estaba construido en mampostería de cal y piedras.
En la actualidad, los restos que nos han llegado son testimoniales. Tan solo subsisten los restos de unas cimentaciones de piedra sin trabajar detrás de la moderna torre de la Casa de Cultura. Del castillo queda algo más, ya que su recinto sirvió desde su voladura en la Guerra de la Independencia (1811) como mirador, plaza de toros y demás usos públicos.
Se conservan los muros principales del perímetro del pabellón rectangular de unos 35 x18 metros hasta una altura de 2 metros. Se intuye dónde estuvo la puerta principal y dentro del recinto se aprecian los cimientos de alguna habitación que estuvo embaldosada con los típicos azulejos de Muel. También se conservan los muros de una torre de planta cuadrangular hasta una altura de un metro sobre el nivel actual y tiene un grosor considerable de más de un metro. Realizada con cal y cantos de una forma bastante tosca.
Este castillo respondería a la tipología de fortaleza de planta regular flanqueada por torres en las esquinas.
El edificio, alrededor de 1700, sufrió un incendio que afectó en gran medida al archivo y puede que también al castillo antiguo, que un peritaje de 1755 afirma que estaba en estado de ruina.
Principales referencias consultadas:
Páginas del Ayuntamiento y de la Comarca,
Zaragoza Turismo (DPZ),
Red Aragón,
Gran Enciclopedia Aragonesa y
Wikipedia.
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Vista del castillo sobre las cascadas del HuervaImagen obtenida de José Antonio Cabetas Aliaga bajo licencia de Creative Commons
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Vista del castillo sobre las cascadas del HuervaImagen obtenida de José Antonio Cabetas Aliaga bajo licencia de Creative Commons -
Almenas del castilloImagen obtenida de José Antonio Cabetas Aliaga bajo licencia de Creative Commons -
Castillo de los Marqueses de CamarasaImagen obtenida de José Antonio Cabetas Aliaga bajo licencia de Creative Commons -
Castillo de los Marqueses de CamarasaImagen obtenida de José Antonio Cabetas Aliaga bajo licencia de Creative Commons