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Vista panorámica

Imagen obtenida de DPZ – Turismo Provincia de Zaragoza bajo licencia de © Todos los derechos reservados

La localidad de Cuarte de Huerva pertenece a la Comarca de Zaragoza y está situada a 6 Km. de Zaragoza y 299 metros de altitud.

Su término tiene una superficie de 8.9 kilómetros cuadrados y cuenta con una población aproximada de 10394 habitantes, a los que se conoce con el gentilicio de cuartano.

Comprende las entidades de población de Cuarte de Huerva, Parador del Ciclista, Urbanización Amelia y Urbanización Santa Fe.

Cuarte de Huerva se halla enclavada en el valle del Huerva, al pie de la carretera de Valencia, muy próximo a Zaragoza, lo que lo determina como una ciudad dormitorio y, a la vez, se beneficia de la expansión industrial de la capital habiendo desarrollado un polígono industrial muy prolífero. Numerosos polígonos industriales e urbanizaciones se han instalado en su término municipal.

Su conjunto urbano presenta un aspecto reciente, sobresaliendo los perfiles de la Iglesia de Santa Cruz, construcción de grandes proporciones que presenta una sencilla portada decorada con claros elementos de influencia clasicista. Junto a ella se levanta la torre campanario, de la misma altura que la fachada.

El casco antiguo de Cuarte de Huerva se apiña en un monte que domina la ribera del Río Huerva. Quedan vestigios, sobre el espolón que domina la localidad de lo que debió de ser un extenso castillo musulmán, el Castillo de Quart, con tres torreones rectangulares de mampostería y tapial.

En las inmediaciones se levantan los restos del Monasterio de Santa Fé, construido en el siglo XIII sufrió siglos más tarde la ocupación y destrucción de las tropas francesas tras su derrota ante los aragoneses en 1808.

Aqui nació el poeta Luciano Gracia en 1917. Está considerado como uno de los poetas más destacados de Aragón en los últimos tiempos.

Cuarte de Huerva se encuentra ubicada en la N-330 (Carretera Zaragoza a Valencia) a tan sólo 6 kilómetros de Zaragoza.

En autobús, servicio regular de autobuses entre Cuarte y Zaragoza cada treinta minutos.

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El nombre de la localidad de Cuarte postula su abolengo latino y su ubicación junto al miliario alzado junto a la vía romana Laminium, quartus o cuarto a partir de Caesaraugusta, calzada que continuaba hasta Care (Cariñena), estación de descanso para las legiones en los tiempos de César y de su sobrino Augusto, y que se prolongaba desde Zaragoza hasta Mérida

El documento más antiguo que se conserva de la villa de Cuarte es del año 1128, al ser reconquistada por Alfonso I el Batallador. Está poblada por moros que suscriben pactos con el rey a cambio de no abandonar sus tierras y sus ganados. El testamento de Alfonso I, muerto en Sariñena en 1134, y el reparto de tierras hecho por el rey a sus colaboradores inmediatos, habrán de condicionar el futuro de la aljama de Cuarte, morisca en su totalidad.

La Orden de San Juan de Jerusalén se convierte en señora de los destinos del vecindario en virtud de una concordia suscrita en la villa de Magallón, en el año 1137, entre el conde Ramón Berenguer IV de Barcelona y los caballeros de la Orden del Temple, de San Juan de Jerusalén y del Santo Sepulcro.

En el año 1610 se produce la expulsión de los moriscos por orden de Felipe III, lo que significó la repoblación cristiana de la localidad, dispuesta de una parte, por los Caballeros de la Orden del Hospital de San Juan de Jerusalén, y de otra parte, por el Abad y monjes del Monasterio de Santa Fé, religiosos de la Orden del Cister, dueños del dominio útil de gran parte de Cuarte desde el año 1341 hasta el año 1835, en que Mendizábal decretó la exclaustración de todos los religiosos españoles.

Hasta la Guerra Civil de 1936-1939, el vecindario de Cuarte no se repuso de la sangría la demográfica provocada por la expulsión de los moriscos de 1610, que significó el exilio de 1405 conversos nacidos y criados en la villa. El estirón demográfico de la localidad se produce con la transformación de Zaragoza en uno de los polos de desarrollo industrial, que se inicia en la década de los años 60.

El escudo es cuartelado en cruz. Primer y cuarto cuartel, de oro con cuatro palos de gules, que es Aragón. Segundo y tercer cuarto de gules, con la cruz llamada de San Juan o de Malta de plata. El escusón central recuerda, con la cifra romana IV, en letras de oro sobre azul, el abolengo latino del Municipio como uno de los oppidum cercanos a la Caesaraugusta de 2000 años atrás. Y como timbre una corona real cerrada.