Museo Diocesano en la Ciudad de Zaragoza
Museo Diocesano
El conjunto arquitectónico que conforma el Palacio Arzobispal de Zaragoza, fue construido sobre el solar del Foro romano del siglo I a.C. y el de la Mezquita mayor de la Taifa de Saraqusta, aprovechando un torreón de la muralla musulmana que albergó la primera residencia del obispo Don Pedro de Librana, después de que Alfonso I el Batallador conquistara la ciudad en el año 1118.
El Palacio Arzobispal ha sido objeto de un impresionante proyecto de restauración, alojando el museo en la crujía norte del conjunto.
El Museo Diocesano se compone de la recepción, 14 salas expositivas cronológicamente engarzadas, en las que se muestran piezas desde el siglo XII hasta el siglo XX de maestros románicos, góticos, mudéjares, renacentistas, barrocos, neoclásicos y rococó, una sala de exposiciones temporales, las oficinas y el almacén.
Cada una de las salas ha sido cuidadosamente restaurada haciendo que sus muros, pavimentos y techos, se presenten como unas piezas más de la propia exposición.
La sección didáctica del Museo Diocesano de Zaragoza tiene como finalidad acercar su colección al visitante, especialmente al público infantil y juvenil, y servir como instrumento que ayude a reflexionar y entender los contenidos de las obras expuestas.
El Museo dispone de salas para exposiciones temporales, que reforzarán la propuesta cultural de primer orden que ya podemos disfrutar a las orillas del Ebro.
Es uno de los mejores museos religiosos de España.
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