Basílica de Nuestra Señora del Pilar en Zaragoza
La Basílica de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza es una joya del barroco que se levanta a orillas del río Ebro.
Según la tradición hubo una capilla primitiva que fue sustituida por un templo románico, tras la conquista de Zaragoza por Alfonso I. En el año 1434 quedó prácticamente destruido por un incendio por lo que inició la construcción de un nuevo templo para sustituirlo. De esta construcción románica tan solo se conserva un tímpano con un crismón labrado en piedra, que está colocado en el muro sur de la plaza junto a la puerta baja.
En 1515 finaliza la construcción de la nueva iglesia gótico mudéjar que sustituyó al dañado templo románico. La iglesia era bastante amplia y constaba de una única nave y un pequeño claustro donde estaba la capilla del Pilar. De esta época es el retablo de alabastro del altar mayor, obra de Damián Forment en 1509.
En 1638 se plantea la ampliación y modernización del templo, emulando el modelo y líneas de la Basílica de San Pedro de Roma. La construcción fue encargada a Felipe Herrera el Mozo, quien inicia las obras en el año 1681 y se prolongan hasta el año 1754.
En 1725 el arquitecto Ventura Rodríguez recibe el encargo de terminar la Capilla dedicada a la Virgen del Pilar y de rediseñar el proyecto inicial del templo. En 1765 terminaban las obras de la Santa Capilla. Fue Ventura Rodríguez quien configuró el templo con el aspecto actual.
En 1872 concluyeron las obras de la gran cúpula central y la primera torre.
El 10 de octubre de 1872, el arzobispo de Santiago de Compostela, monseñor García Cuesta consagró el nuevo templo en una ceremonia solemne en la que participaron más de cien mil peregrinos.
El resto de las torres fueron levantadas en 1907 y 1961 y en los años 1940-1950 se decoró en piedra la fachada que da a la plaza.
El interior es de gran belleza y grandiosidad, consta de una planta con tres naves de la misma altura, cuyos muros se decoran con motivos clasicistas: pilastras, hornacinas, guirnaldas, palmas y ángeles tenentes.
La Santa Capilla es un pequeño templo donde se encuentra colocada la imagen de la Virgen dentro de un camarín de plata con fondo de mármol verde sobre la columna. En este espacio se funden jaspes, mármoles y bronces con la decoración escultórica y la pintura de su cúpula. En el altar se representa la escena de la Venida de la Virgen ante Santiago y los primeros convertidos, obra de José Ramírez de Arellano. La cúpula fue decorada por el pintor Antonio González Velázquez, con el tema de la Venida de la Virgen y la construcción de la Santa Capilla.
El retablo de alabastro del Altar Mayor fue realizado por Damián Forment entre 1509 y 1518 y está labrado en alabastro procedente de las canteras de Gelsa.
El Humilladero, oquedad abierta en el muro por la que aparece la Santa Columna a través de un pequeño óvalo, se localiza detrás del camarín de la Santa Capilla.
El Coro reproduce en su sillería un iconográfico de la vida de Cristo y de la Virgen y está cerrado con una verja manierista. Procede del antiguo templo gótico y está situado a los pies de la nave central frente al Retablo del Altar Mayor
Otro tesoro que alberga es el fresco de gran belleza Regina Martyrum pintado por Francisco de Goya. En el coreto hay otra pintura realizada por el pintor en su juventud.
La colección de Los Mantos de la Virgen supera las trescientas unidades, siendo el más antiguo el confeccionado por las Madres Capuchinas de Zaragoza en 1762.
Fuente: Cabildo Metropolitano de Zaragoza
Bibliografía
ANSÓN NAVARRO, ARTURO. Las Catedrales de Aragón, Zaragoza 1987
LABORDA YNEVA, JOSÉ. Maestros de obras y arquitectos del período ilustrado en Zaragoza, Zaragoza 1989
USÓN GARCÍA, RICARDO. La intervención de Ventura Rodríguez en el Pilar, Zaragoza, 1990
Resumen
Basílica de Nuestra Señora del Pilar
Plaza del Pilar, 10 – Zaragoza
41.65677-0.878561
Siglos XVII al XX
Barroco